El póquer es quizá el juego de cartas más famoso del mundo. Se ha convertido en un fenómeno cultural que ha generado sus propios términos, jerga y, por desgracia, una serie de mitos sobre el póquer que vienen de lejos.
Para ser un juego que existe desde hace tanto tiempo, no es de extrañar que los mitos del póquer sean tan frecuentes. Sin embargo, pueden disuadir a los jugadores de probar el juego y a los operadores de incluirlo como parte de su oferta de productos. Estamos aquí para separar la realidad de la ficción y disipar los mayores mitos del póquer.
El póquer se basa en la suerte
La creencia más extendida sobre el póquer es que es un juego basado exclusivamente en la suerte y nada más. Esto no es cierto. Obviamente, hay un elemento de suerte. Nunca se puede predecir qué cartas saldrán de una baraja. Sin embargo, decir que el póquer es cuestión de suerte es totalmente falso.
El póquer es un juego profundamente estratégico que requiere mucha reflexión y consideración. Los mejores jugadores son estudiantes del juego; aprenden todo lo que pueden sobre diferentes tácticas y estrategias y pueden ponerlas en práctica para obtener una ventaja sobre sus oponentes.
Mientras que a algunos jugadores les encanta dejarlo todo en manos de la suerte, otros buscarán un juego que les dé la oportunidad de desarrollar y utilizar sus habilidades y destrezas. Como operador, la oferta de un juego de póquer atenderá a estos jugadores con una mentalidad más estratégica, asegurándose de que elijan su plataforma en lugar de la competencia.
Sólo se puede jugar al póquer en persona
Según algunos expertos, el juego del póquer tiene unos 1.000 años de antigüedad. Durante mucho tiempo se ha jugado en casinos, clubes y espacios privados, y se ha disfrutado como un acontecimiento social tanto como un juego de azar.
Sin embargo, los albores de la era digital han cambiado la faz de la industria del juego, y el póquer no es una excepción. Mientras que las máquinas tragaperras, e incluso los juegos de mesa como la ruleta y el blackjack, se trasladaron sin problemas al mundo digital, los jugadores de póquer se mostraban algo más reticentes a disfrutar de su juego favorito en línea.
El póquer es un juego social que da prioridad a la comunicación y la interacción entre los jugadores. Durante mucho tiempo, esto ha sido imposible de reproducir en las versiones digitales del juego, hasta ahora. Los modernos juegos de póquer en línea, como el hold'em con crupier en vivo, utilizan una innovadora tecnología de streaming para retransmitir imágenes en directo de las mesas de juego a los jugadores a distancia. Estos jugadores también pueden comunicarse entre sí, difuminando los límites entre las versiones física y digital del juego.
El póquer en línea es más difícil
Aunque el póquer en línea ha avanzado y se ha desarrollado de forma increíble en un corto espacio de tiempo, algunos jugadores todavía lo tratan con cierto recelo. Uno de los mitos del póquer más extendidos entre los jugadores de hoy en día es que el póquer online es, de alguna manera, más difícil. Peor aún, algunos jugadores creen que el póquer en línea está amañado en su contra.
Esto no podría estar más lejos de la realidad. Los desarrolladores de juegos de póquer en línea utilizan tecnología punta y sistemas sofisticados para garantizar la equidad a todos los participantes. Para ello, utilizan generadores de números aleatorios (RNG) que simulan la aleatoriedad y evitan que los jugadores puedan identificar patrones y predecir las cartas antes de que salgan.
Por eso los juegos de póquer con crupier en vivo son una opción excelente para los operadores de casinos en línea. No necesitan depender de los RNG, sino que muestran a los jugadores un flujo en directo de cartas físicas a medida que se reparten. Esto significa que atraen hasta al más cínico de los jugadores de póquer y tienen el potencial de convertir en adeptos a los más dedicados al juego en su forma tradicional.
Jugar al póquer es caro
El póquer es un juego que a menudo se asocia con la ostentación y el glamour de Las Vegas. Nos hace pensar en grandes apostadores que se juegan millones en una sola mano. Aunque este aspecto del juego existe, no representa en absoluto la experiencia media del póquer. La mayoría de la gente juega con amigos o desconocidos en partidas de apuestas relativamente bajas.
A pesar de la realidad del juego, otro de los mitos más extendidos sobre el póquer es que para jugar se necesitan grandes sumas de dinero. Esto puede disuadir a los jugadores de siquiera plantearse probarlo, dejándoles que se queden con otros títulos como el blackjack.
Si decide ofrecer póquer como parte de su oferta de productos, puede ser una buena idea contar con mesas de apuestas altas y bajas. Esto garantizará a los nuevos jugadores que no necesitan gastar mucho para disfrutar del juego, pero también satisfará a los jugadores experimentados que quieran subir la apuesta.
Conclusión
Los mitos del póquer abundan. Mientras que algunos pueden ser inofensivos, otros pueden ser perjudiciales para el juego. Esperamos que al acabar con los mitos que hemos enumerado anteriormente te hayamos dado una mejor comprensión del juego y de por qué puede ser una fantástica adición a tu casino online.